Áxel Troncoso

En la pista atlética del Estadio Recoleta unos 25 jóvenes entrenan. A un costado del pasto, con el polerón rojo de los Juegos Olímpicos Londres 2012 y sin sus típicos anteojos negros, Cristián Valenzuela (30) habla por celular. Luego de colgar conversa con su entrenador, Ricardo Opazo, quien le pide que se suba el pantalón hasta las rodillas para examinar su pierna antes de comenzar a correr. Medallista de oro olímpico el año pasado en Londres, Valenzuela perdió la visión a los 12 años, debido a un glaucoma congénito. Más tarde, durante cuatro años luchó contra una depresión, hasta que el deporte “le cayó del cielo”. El atleta dice: “Dios puso el atletismo en el momento exacto y ahí me puse a entrenar, un poco para calmar el dolor, para refrescarme y para olvidar el hecho de ser ciego”.

Hoy Valenzuela (en la foto) compite en carreras de la categoría T11 –para personas completamente ciegas– y se prepara para disputar medallas en los Juegos Parasuramericanos 2014 que se desarrollarán entre el 27 de marzo y el 2 de abril del próximo año en Santiago. En el evento, Valenzuela buscará superar a Odair Santos de Brasil, quien le ganó por alrededor de 10 segundos en la competencia de 1.500 y 5.000 metros en el campeonato de Lyon. De ganar en Santiago, Valenzuela quedaría primero en el ranking del Comité Paralímpico Internacional (CPI).

El Estadio Nacional será la sede principal del primer evento sudamericano de esta clase. Recibirá a unos 500 deportistas de diez países de la región, quienes competirán en siete disciplinas: tenis silla de ruedas, básquetbol silla de ruedas, bochas, natación, levantamiento de pesas, tenis de mesa y atletismo. Puertas más anchas y accesos más expeditos son algunas de las modificaciones que deberá implementarse en cada recinto para que los deportistas puedan desplazarse sin problemas.

El tenimesista Cristián Dettoni (39) logró una medalla de oro en los Parapanamericanos de Guadalajara 2011. Ahora entrena dos horas todos los días en la sede del Comité de Entrenamiento Olímpico (CEO) en Ñuñoa. El CEO les facilita las mesas y el gimnasio para que la selección pueda trabajar “de manera adecuada”. Según Dettoni el deporte paralímpico estuvo en silencio por mucho tiempo debido a la mala gestión realizada por la Federación Paralímpica de Chile. “Ellos tenían malos tratos hacia nosotros, no respetaban a la gente que trabaja con ellos y la designación de los deportistas para competencias era a dedo. Ellos imponían sus criterios y no importaban los resultados que tenían los deportistas”, dice Dettoni.

En la formación de nuevos deportistas, la Fundación Teletón y el Instituto Nacional de Rehabilitación cumplen una importante misión. “Estas instituciones son los nichos donde debemos buscar nuevos y más deportistas”, asegura Dettoni. Hoy, al intentar profesionalizarse, cada deportista debe buscar las formas de financiar su carrera.

Cristián Valenzuela recibe un aporte del Gobierno y de dos auspiciadores. “Homecenter Sodimac tiene un convenio conmigo por haber sido trabajador de la compañía. Creo, eso sí, que la empresa privada debería aportar más en el deporte”, dice el atleta. Dettoni obtiene apoyo por su buen rendimiento. “Yo cuento con el apoyo de ADO que me otorga una beca, atención kinesiológica y el préstamo de instalaciones. Mi auspiciador es Puma, que me entregan la ropa necesaria para mis entrenamientos y competencias”, explica el tenimesista.

El 20 de agosto pasado se anunció la creación del Comité Paralímpico de Chile. Aunque aún no se ha formalizado la idea, esta corporación se encargará de trabajar con las federaciones de las distintas disciplinas y preocuparse de la preparación de los deportistas para los juegos del próximo año en la capital. Patricio Delgado, miembro del Comité y profesor de educación física en la Fundación Teletón cree que la entidad permitirá crear una política deportiva para el país. “Actualmente estamos trabajando los proyectos para los juegos Parasuramericanos 2014 y nuestra misión es centrarnos en ver cómo llegarán estos deportistas a las distintas competencias”.

Ricardo Figueroa, coordinador de los juegos en Santiago 2014, reconoce que la cita del próximo año permitirá tener una nueva visión del deporte, pero afirma que Chile está un paso atrás. “Con la experiencia de los Parapanamericanos en Guadalajara y los Paralímpicos en Londres, me di cuenta de que el deporte para personas con discapacidad en Chile está bastante atrasado. Es un área en la cual se desconoce el potencial y la riqueza que existe en los deportistas. Ellos conocen lo que es excelencia y rendimiento”.

Para Figueroa los desafíos de la organización del evento son recobrar la confianza en el Comité Paralímpico de Chile. “La responsabilidad de esta organización es crear unos buenos juegos y esperar que vuelvan muchos jugadores que se sintieron pasados a llevar o encontraron las puertas cerradas y se cansaron”, detalla. Además, Figueroa considera importante crear nuevas ligas y federaciones deportivas de cada disciplina paralímpica, las cuales hoy apenas existen.

Sobre el autor: Áxel Troncoso es alumno de cuarto año de Periodismo y este artículo es parte de su trabajo en el curso Taller de Prensa Escrita, dictado por la profesora Jimena Villegas