Daniel Rodríguez estudió fonoaudiología en la Universidad de Talca y desde el sur se trasladó a Santiago en el 2011 a estudiar el Magíster en Comunicación Social con mención en Comunicación y Educación, dictado por la Facultad de Comunicaciones. Hoy está realizando clases de Comunicación y Tecnología en la carrera de Fonoaudiología en la Universidad Católica de Temuco, IX Región.
“Me vine a vivir a Santiago sólo para cursar este postgrado con el objetivo de buscar las herramientas necesarias para desarrollar mis proyectos. Al principio estaba medio perdido en lo que quería hacer y algunos de mis compañeros también, porque veníamos de carreras que no provenían del área de las comunicaciones. Sin embargo, durante el Magíster me di cuenta que uno de mis proyectos se relacionaban con las tecnologías para fonoaudiología y me orienté”, explicó Daniel Rodríguez.
La tesis realizada en el Magíster por Daniel, el mejor alumno de su generación, tuvo como objetivo medir los efectos de la multimedia en niños normales, entre 5 y 6 años. “A niños normales me refiero cuando se descartan trastornos del lenguaje, auditivo e intelectual, por ejemplo. Con esto quise averiguar si el uso de una App multimedia es más efectivo en el aprendizaje que una lámina. No hubo una diferencia significativa. Pero la literatura dice que a las personas con dificultades les sirven mucho los elementos multimedia y ellos eran niños normales”, afirmó Rodríguez.
Sin embargo, paralelamente fue trabajando junto al programador Marco Beraud en una aplicación fonoaudiológica llamada TEL Calculator, que permite obtener la interpretación del test de evaluación del lenguaje -estandarizado en Chile por el Ministerio de Educación, Mineduc- para detectar trastorno del lenguaje. “Este proceso anteriormente se hacía a mano, con calculadora para tomar algunas medidas como la desviación estándar y revisando unas tablas de normalidad dentro del manual del test (proceso lento). Te puedes demorar entre 20 minutos a una hora en realizarlo, en cambio la app ha solucionado el tedioso proceso y lo hace en un par de clicks!”. Está enfocado al lenguaje oral”.
Además, Daniel enfatizó que realizaron esta App, porque en cada escuela de lenguaje y proyecto de integración por TEL (Trastorno específico del lenguaje) se aplican al menos 2 veces al año más de 200 (si hay 200 niños, es una por niño) pruebas de este tipo, y son en total 4 pruebas, dato relevante porque en Chile hay 1.251 escuelas de lenguaje, según datos del Ministerio de Educación (2011).
“Hemos desarrollado una de las primeras App fonoaudiológicas en Chile y en un mes hemos tenido 1.500 descargas (que es bastante, pensando que es específica para fonoaudiólogos chilenos). La idea surgió en una clase con mis alumnos (Universidad Autónoma) sobre tecnología para fonoaudiología, donde existía en un formato Excel y nosotros lo desarrollamos en una aplicación”.
“Siento que mucho de esta App nace de lo que aprendí en el Magister, pues es una solución que optimiza un proceso y no una que lo entorpece, y se adapta totalmente a los usuarios. Asimismo, el magíster me permitió contar con las técnicas para identificar un problema y para plantear una solución, para hacer un proyecto y saber las formas cómo las personas usan la tecnología. En el fondo desarrollé habilidades de gestión y resolución de problemas”, finalizó Daniel Rodríguez.
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Información de Carolina Guzmán en Noticias UC.