La batalla por quién salía con la respuesta más ácida venía de antes. Desde que la Dirección del Trabajo denunció las irregularidades en la empresa Frutales y Viñedos Errázuriz Ovalle, en mayo, Evelyn y Fra-Fra se lanzaron dardos cada vez más venenosos. Ella llamó públicamente a condenar sus prácticas “de esclavitud”; él respondió más duro: “Posa de izquierda para ocultar su condición de hija de militar golpista”, y siguió: “Nosotros, los liberales, no necesitamos matar gente para imponer nuestras opiniones”.

Luego de que Evelyn cuestionara el diagnóstico del Fra-Fra, el hijo del empresario, Francisco Javier Errázuriz Ovalle, siguió con la tradición de su padre:

—Ella tampoco creía que existían detenidos desaparecidos, torturados y ejecutados políticos mientras trabajaba para el gobierno militar del cual su padre era parte. Esperamos que pronto recupere la cordura y se dedique a trabajar, que para eso le pagamos todos los chilenos y no para andar pauteando a medios de comunicación, o perseguir a grupos económicos.

La instrucción era no responder, no darle más riendas al conflicto. Pero Evelyn no se aguantó. “Yo le decía que para qué, que no le respondiera nada. Pero fue una batalla perdida”, recuerda la asesora Andrade. “En la actividad –la 35ª Feria Laboral– cuando le empezaron a preguntar sobre el Fra-Fra me puse detrás de las cámaras y le hacía un gesto de que no respondiera. Al principio no dijo nada pero luego me miró como diciendo ‘no me aguanté, ya hice la maldad’”.

—Mientras más me ataque la familia de Errázuriz, más honrada me siento, porque en realidad todo Chile ya los conoce. Lo que sucedió con estos trabajadores de Paraguay, todo el mundo lo vio, todo el mundo vio la vergüenza que eso significaba para nuestro país; por lo tanto, que a mí me ataquen por defender a trabajadores y la dignidad de los trabajadores, yo por lo menos me siento muy honrada. Yo me imaginaba que cuando entró a la clínica podía efectivamente haber tenido algo. Por lo tanto, que lo dejaran adentro podía ser cierto o no. Pero después tuve datos de que lo que efectivamente tenía era un hematoma interno por algún tipo de golpe y no un derrame por estrés como habían dicho”.

Y tenía razón: el informe del Servicio Médico Legal publicado el 6 de diciembre, en relación al caso, atribuyó la hemorragia de Francisco Javier Errázuriz a una caída y no al estrés que le habrían generado las acusaciones por trata de ciudadanos paraguayos.

“Yo quiero señalar que voy a seguir con esta actitud de hacer cumplir los derechos de los trabajadores. Si algún empresario, después de las investigaciones de la fiscalía o de la Dirección del Trabajo, tiene problemas de salud, yo, de verdad, lo lamento muchísimo, pero debieran pensar esas cosas antes de no cumplir con las leyes laborales”, dice la Ministra.

“Para nosotros la actividad sindical es sagrada. Es básico para que una empresa pueda funcionar bien. Y para eso necesitamos dirigentes sindicales que conozcan la ley, que tengan criterio, que entiendan la economía abierta y la competencia, que pidan lo que se pueda pedir y no más: necesitamos una actividad sindical moderna y constructiva”, dice Evelyn en su cuenta pública, a la que asistieron varios dirigentes sindicales. Arturo Martínez, Presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), no.

“Las conversaciones con el Ministerio están totalmente cortadas. La Ministra no tiene disposición al diálogo. Ella nos ha agredido verbalmente, por eso no tenemos ningún contacto. Se ha dedicado a fiscalizar los cafés con piernas, a pelear con el Fra-Fra y no a mejorar las condiciones con los trabajadores. Lo único que hace es usar al Ministerio como un marketing”, dice Martínez.

Evelyn admite las diferencias: “Muchas veces los sindicatos son pura reivindicación. Con ciertos gremios hemos tenido conversaciones estupendas y con otros ha sido más difícil. Pero eso es natural. Arturo Martínez es una persona que está muy en la política. Él ha dicho que aspira a que este gobierno no siga y entonces claro que no es fácil el diálogo”, dice.

El presidente de la Confederación de Trabajadores del Cobre (CTC), Cristián Cuevas, cree que al menos ha habido la disposición para entablar el diálogo: “Ella ha escuchado a las distintas organizaciones sindicales y a los trabajadores del cobre también. Hemos tenido conversaciones extensas, una relación amable, pero ha faltado concretar. Tiene un discurso muy pro-fiscalización, pero en la práctica el trato con las empresas ha sido condescendiente. Le falta sintonía: entender que en Chile se necesita una reforma laboral profunda”, dice.

En cambio, el tesorero de la de la Central Autónoma de Trabajadores (CAT), Abraham Armijo, halaga a Matthei sin freno: “Nosotros hacemos un reconocimiento abierto, la Ministra ha tenido una posición sumamente dispuesta para solucionar los problemas, para concitar la participación transversal de las organizaciones sindicales y abordar materias que no se habían abordado. Nosotros reconocemos su voluntad, independientemente de los resultados que se obtengan en el Senado; ahí lo que prima son los conflictos de orden político”, dice.

Pero el problema pendiente está dentro de su propia casa. Raúl de la Puente, presidente de la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF), denunció el despido de mil 200 funcionarios en el sector público y responsabilizó a la Ministra. “En Evelyn Matthei recae la responsabilidad, por eso, nosotros le hemos comunicado a ella del número de despedidos que existe en la Dirección del Trabajo, en el Instituto de Previsión Social, en la Dirección del Crédito Prendario. Todas instituciones que pertenecen al Ministerio del Trabajo. Ella ha quedado comprometida en revisar estos casos y hacer su contacto con el servicio respectivo. Ojalá cumpla”, declaró de La Puente al medio electrónico Información Pluralista.